Hace unos días, organizamos una mesa redonda para abordar la seguridad en el nuevo parque deportivo, una de las cuestiones que más interés ha suscitado dentro del proceso participativo thinking Fadura.
El propósito de esta mesa, moderada por Asier Amezaga, del equipo thinking Fadura, era contrastar las principales claves en relación a la seguridad y el acceso a Fadura con personas expertas y desde distintas ópticas. Como punto de partida, Sorne Esturo, responsable de proyectos de arquitectura de Getxo Kirolak, dio la bienvenida y recordó que las actuaciones acometidas por la Agencia Vasca del Agua (URA) para acondicionar el cauce del río suponen cambios importantes en el complejo deportivo y, por lo tanto, una oportunidad única para repensar y mejorar toda la zona y continuar impulsando la actividad deportiva, la calidad de vida y la adquisición de hábitos saludables en Getxo. “Pensar en un parque abierto y seguro no es una paradoja”, continuó Sorne; “en la actualidad, podemos disponer de sistemas eficaces para poder disfrutar del espacio con seguridad pero sin perder libertad. Más aún, hay muchas experiencias similares a la nuestra en otros lugares en las que se observa que un espacio abierto, habitado y cuidado por todos y todas, es la mejor garantía para que sea seguro”.
Habitar el espacio
JuanMa Murua, economista y consultor en el ámbito de la gestión de ciudades y territorios y especialista en políticas deportivas, centró su presentación en introducir tres teorías relevantes para entender cómo la seguridad percibida es un factor clave a la hora de ubicar equipamientos deportivos en el espacio público:
- La teoría de las ventanas rotas (Wilson y Kelling, 1982) y la importancia de un buen mantenimiento de estos espacios para evitar que los mismos deriven en entornos inseguros.
- La teoría del espacio defendible (Newman, 1972), que nos lleva a pensar en las bondades de la segregación y diferenciación espacial para que las personas se identifiquen con esos espacios y cuiden de ellos.
- La teoría de los ojos de la calle (Jacobs, 1961), que remarca la importancia de que exista una comunidad, y cierto dinamismo social, para dotar a los espacios públicos de seguridad.
“El espacio público es conflictivo por naturaleza porque en él conviven muy diferentes intereses; debemos tener confianza en el diseño de espacios abiertos y en la autoresolución de muchos de los conflictos que se generaran”, afirmó JuanMa. En este sentido, dio a conocer la experiencia de Nueva York, donde están rediseñando parques que estaban cerrados para convertirlos en espacios abiertos donde exista una mayor convivencia entre las personas; o el caso de Alcalá de Henares, donde han reemplazado las placas que indicaban “prohibido jugar” por otras que dicen “juega respetando”. Este vídeo resume de forma muy breve la presentación:
Seguridad integral
Jose María Sanz, desarrollador de proyectos de seguridad integral y protección en RKL, y miembro del equipo que está diseñando el Plan Director de seguridad del futuro parque deportivo, presentó las líneas maestras del sistema de seguridad que se está diseñando para dar respuesta a posible accidentes, así como para la protección de actos antisociales en el nuevo parque. En opinión del experto, hay que tener en cuenta la seguridad y protección desde el propio diseño, tal y como se está haciendo en el caso del parque deportivo de Fadura.
La seguridad integral para el nuevo parque combina soluciones que atienden a las personas que deben operar en estos sistemas, los procedimientos que deben ser diseñados para ser lo más efectivos y eficientes posible, y la tecnología que, actualmente, facilita unas prestaciones nunca vistas y que debemos aprovechar.
La propuesta de seguridad se basa en tres círculos. El primero de ellos tiene que ver con la seguridad de perímetro que va a atender los flujos de personas y vehículos, y que estará dotado de medidas de videovigilancia, geolocalización, megafonía o control de vehículos, entre otras. El segundo círculo de seguridad se centrará en las instalaciones e infraestructuras deportivas con medidas de detección y evacuación de incendios, control de accesos, control de aforos, interfonía, etcétera. Por último, el tercer círculo de seguridad pone el foco en las infraestructuras críticas, como son los cuadros eléctricos o las instalaciones informáticas. La gestión y coordinación de todas estas medidas y sistemas, tanto humanos como procedimentales y tecnólogoicos, es la clave para generar un espacio que sea y se perciba como seguro.
Arquitectura y seguridad
Para Nerea Sarasola, que forma parte del equipo de arquitectura de thinkingFadura, “la preocupación por la seguridad es algo que se ha manifestado a lo largo de todo el proceso participativo. El escenario que baraja el equipo de arquitectura pasa obligatoriamente por aplicar medidas inteligentes que permitan limitar sin segmentar y sin restar libertad, medidas que sumen y no que resten. Todo esto sin que las diferentes instalaciones deportivas se conviertan en islas independientes».
Para Jon Laurenz, también del equipo thinking Fadura, el reto consiste, desde el punto de vista urbanístico y de arquitectura, en poner de manifiesto la importancia del parque fluvial en diálogo permanente con las infraestructuras deportivas y con la salud, un aspecto central en la transformación de Fadura.
Aprender a convivir
Las opiniones de las personas expertas dieron lugar a intervenciones del público asistente que planteó cuestiones relevantes como, por ejemplo, las posibilidades reales de transformar un espacio cerrado, como el actual, en un espacio donde se eliminen las barreras físicas perimetrales, que impiden el acceso al parque, y recuperar el espacio para el disfrute de todas las personas.
Existe un punto clave que guarda relación directa con la seguridad del parque, que es el de la convivencia en espacios y actividades o entre personas abonadas, clubes y vecinos y vecinas de Getxo. La apuesta por un parque seguro implica medidas tećnicas y arquitectónicas pero, sobre todo, implica habitar, dotar de vida y actividad al espacio. En este sentido, es pertinente reflexionar sobre la utilización privativa que, en ocasiones, algunas personas y entidades hacemos de Fadura. Para comenzar el debate sobre esta clave, te invitamos a responder a la siguiente pregunta ¿Qué acciones se te ocurren para mejorar la convivencia en Fadura?